La situación política y económica actual está generando inestabilidad en diversos sectores, incluido el mercado inmobiliario. Según el informe más reciente del Consejo General de Colegios Oficiales de Agentes de la Propiedad Inmobiliaria en España, se prevé que el mercado residencial esté influenciado por las acciones del BCE y la formación del nuevo Gobierno durante el resto del año, lo que significa que la incertidumbre seguirá siendo un factor clave a corto plazo.
El informe destaca que la evolución del sector estará condicionada por la incertidumbre política y económica, así como por las políticas monetarias del Banco Central Europeo y el Banco de España, ya que la adquisición de propiedades depende en gran medida de la financiación bancaria para las familias. En la reunión de julio, el BCE ya aumentó el precio del dinero al 4,25%, y se espera que anuncie un posible aumento adicional en septiembre.
El Consejo General de COAPIS, como máximo organismo representativo de los agentes de la propiedad inmobiliaria, señala que es probable que el mercado de la vivienda evolucione en los próximos meses de manera similar a la primera mitad del año. Durante estos meses, se ha observado una disminución en las transacciones de compraventa de viviendas y en la firma de nuevas hipotecas, así como una estabilidad en los precios.
En este sentido, el Consejo General de COAPIS subraya que los precios de la vivienda han experimentado un estancamiento durante el primer semestre debido al aumento de los tipos de interés, lo cual impacta en los bolsillos de los consumidores y las familias. Además, advierte que si la situación no se estabiliza, es posible que se registren disminuciones en el precio medio de las operaciones de compraventa, especialmente en el mercado de viviendas de segunda mano.
Estas previsiones coinciden con los informes realizados por los servicios de estudios y análisis de los principales bancos españoles, los cuales pronostican fuertes descensos en las transacciones de compraventa este año, con una leve recuperación en 2024. En cuanto a los precios, las proyecciones difieren: mientras Bankinter espera una disminución cercana al 5% en los precios entre 2023 y 2024, la tasadora Euroval estima que el precio medio de las viviendas aumentará en promedio un 6% hasta 2025 en España, y que serán pocas las provincias donde se producirán descensos.
En conclusión, la incertidumbre política y económica actual está teniendo un impacto en el mercado inmobiliario, generando caídas en las transacciones de compraventa y una estabilidad en los precios. La evolución futura del mercado dependerá en gran medida de las decisiones del BCE, la formación del nuevo Gobierno y la estabilización de la situación económica. Es importante que los consumidores estén informados sobre estas circunstancias a la hora de tomar decisiones relacionadas con la compra o venta de viviendas.